PARTES DE LA COMEDIA

Una comedia comprende dos partes. Cada una supone un desenlace; el primero suele ser más importante que el segundo, hasta el punto de que la intriga propiamente dicha se acaba en medio de la obra.

Ésta comienza con un prólogo, que explicaba la situación. Este prólogo era más largo que el de las tragedias, ya que en éstas los espectadores conocían de antemano el argumento, generalmente mitológico, de la obra.

Una vez informado el público, sale a escena el coro, cuyo vestuario, por imprevisto, constituye uno de los mayores atractivos del espectáculo.
Entre el coro y demás personajes de la obra tiene lugar el agón, la "acción", cuyo final supone el primer desenlace, en el que suele vencer el protagonista.
En este momento el corega, o 'Jefe del coro", sin el atuendo teatral, avanza hasta el borde del escenario y pronuncia una arenga cómica, relacionada más o menos con la intriga de la obra, sobre la situación política o contra algunos abusos. Es la parábasis.
Tras este intermedio o parábasis, se suceden varias escenas cortas o escenas yámbicas, relacionadas con la primera parte de la obra, que culmina en el segundo desenlace, es decir, con el éxodos, o "salida" del coro.